El Aprendiz. Episodio Final. Game Over.

impagables capturas cortesía de NbNW

Se acabó lo que se daba. La impresión general, que me lo he pasado teta escribiendo estas crónicas estrafalarias al principio, que me aburrí un poco a la mitad, y que me cansé al final. Lo mejor: los comentaristas con nombre, anónimos y aprendices que he “conocido” con la excusa. Los nombraría a todos pero me acabaría quedando el post incluso más largo de lo habitual. Que por cierto, ya tiene mérito que os los leáis, ni mi hermana pequeña ni mi mujer han llegado hasta el final de ninguno, “Santi que es que son muy largos”, me dicen. Gracias a todos, y a lo que vamos, a rematar la faena.

Y por seguir con el símil tauromáquico, la suerte al entrar a matar a punto ha estado de deslucirla. A lo mejor es que me ha cogido a mi con el cuerpo raro, pero se supone que esto tenían que haber sido bastante más emocionante (movin, exciting, touching, thrilling), un ain’t no fucking por aquí, un chiquetete partiéndose la camisa por allá, o un hamstercillo acojonando... pero nada... todo muy limpio... hasta de la pelea final que anticiparon en el episodio anterior nos han privado. Mira que la cosa prometía al principio, cuando hacen su entrada todos los aprendices que se habían quedado por el camino para que los finalistas eligieran a unos cuantos para acompañarles en su último trance. Me recordó un poco a cuando yo era pequeño, y nos ponían a todos en la pared, y los dos mejores iban eligiendo a los que jugarían con ellos en la pachanga del recreo. Yo hasta los siete llevé un parche en el ojo izquierdo, unas gafas gigantes y botas ortopédicas. No me elegían el último porque había alguno más tarado y torpe que yo. Además con las botas aquellas daba unas patadas tremendas y siempre era mejor tenerme de tu lado en las batallas futboleras que armábamos. Teresa Puedo Comunicarme con Tres Cuartas Partes del Mundo elige para Crash.es, en este orden a Anahí, Ana y Noelia. Y Mi Nombre Es Juancho Lanchares para Stamina a Quique, Manuel y Benjamín. La primera cosa que rechina es que ella sólo elija a chicas y él sólo a chicos. Y la segunda, que el último elegido sea Benjamín. Está claro que es un tiburón, y le pasa como a mí con las botas, es mejor tenerlo de tu lado. Los descartados ponen cara de circunstancia, se han dado el viaje pa’ná. Ángel Amos Primo lo asume con frescura, “creo que han prescindido de mi sencillamente porque ellos son mejores”, pero Flipaco está un poco despechado, se siente un titular que a veces tiene que estar en el banquillo para descansar... hombre, ese discurso vale cuando uno descansa para jugar la final de la champions, pero no para cuando ya no quedan partidos que jugar. En esta ocasión los equipos tienen que realizar cada uno un evento diferente para la Fundación Gomaespuma. Heinrich dice algo, no recuerdo qué, pero me encanta su acento y Regina les da su bendición: Podéis iros (en paz).

Los elegidos vuelven al chalé, y nos deleitan con las típicas escenas de asiento trasero de furgoneta, con las chicas en plan pandilla de adolescentes y los chicos un poco apretados por culpa de Quique Brainstorming, que pone ojillos de enamorado cuando habla de Benjamín, dice que es la persona más espectacular que ha conocido en la vida, me recuerda un poco a lo del ser superior de Butragueño. Y llegan a casa y todos saltan y retozan, “¡ya estamos en casa, sin sapatos y todo, esto es estar en casa!” dice Anahí muy excitada, y a mi se me vienen a la cabeza los pies negros de Grandma.

Los líderes van a visitar a Gomaespuma. Lo primero que les preguntan estos es sí Heinrich y Regina son sus padres. Regina se parte el culo de la risa.  Y los Gomaespuma dale que te pego con que si son sus padres. Les explican un poco lo que hacen y los eventos que organizan. Juancho se queda con Flamenco Pa’Tos y Teresa con Magia Pa’Tos. “Luxury, fenomenal” dice ella, feliz como una perdiz. Gran cagada digo yo, te has quedado con el mini-evento. De todas formas, a Guillermo y Juan Luis parecen haberles gustado más las maneras de Teresa. Las cosas como son, ellos son ejemplares machos, y ella una hembra resultona que sonríe más que el Sr. Mojón. Aunque a propósito de la sonrisa de Teresa, conforme han ido avanzando los programas me ha parecido más inquietante, postiza y hasta nerviosa, vamos, que al final me acabó dando miedo. Por un momento pensé que iba a sacar un cuchillo y sin cambiar el gesto clavárselo a Don Lluís en la mollera. 

Juancho lo tiene todo pensado al milímetro. Se nota que es un superviviente y una vez ha llegado hasta aquí va a darlo todo. Heinrich está encantado con él, “va muy al grano, muy eficiente, eficaz...”. Topo Gigio ya tiene favorito, y mucho tiene que cambiar esto para que el vendedor número 1 de Ford Focus no acabe dando la sorpresa y derrotando en la final a la pija multilingüe. Los dos equipos se reúnen con unos responsables que les diseñan el evento. Stamina se van al Corral de La Pacheca y dan con un bon vivant flamenco que les dice que si hay güisqui no tienen que preocuparse por nada. El de la magia es un poco más pejigueras, y hasta se ríe de Noelia cuando esta pregunta si el ryder es una persona. Que ya le vale... El del corral es un tío super-cool, que los cala al momento “Benjamín es un triunfador, Manu es el bueno y Quique es de Cádiz”, que imagino que es lo mejor que se puede decir de cada uno. Teniendo en cuenta que el de Cádiz se declara vecino del barrio de Salamanca, se ha quedado sin virtudes.

Y comienza el juego. Y la multilingüe es la primera en jugar sucio, trata de quedar con el de producción antes de que llegue Juancho. Lo mismo era para hacerle un baile privado. Juancho la descubre “llama a César para decirle que le atendiera antes que a mi... ¡vale! que te atienda...” De todas formas el de producción pasa de quedar con ella. Hablan con el tipo y resulta que ellos tienen que llenar un aforo de cuatrocientos y pico asientos y ellas de ciento y pico. Teresa sigue con su risa nerviosa mientras que Juancho hace un despliegue allí de medios y planificación. Ellas lo más que atinan es a improvisar un boceto chungo, momento estelar de Anahí. Luego Teresa les cuenta la experiencia a sus compañeras entre risas “Yo allí como una señora aguantando el tipo”. Mientras ellas están riéndose de esto, Manu Grábatelo A Fuego pinta, estupendamente por cierto, el logo gomaespumino... ¡¡resulta que es un artista!! Y el artista acaba cerrando el camarero y el catering para 400 personas por 700 euros... cágate lorito. Tocan a menos de dos euros por persona y van a poner jamón y vino fino. Cuando el del catering se lo diga a su jefe lo va a despedir más rápido que Bassat al que echó las cuentas con las aceitunas. Y Teresa mientras, en vez de currar, sigue malmetiendo... muy mal, eh... muy mal... ¿dónde ha quedado tu impecable trayectoria? A qué viene decir que si se acuestan temprano porque lo que prima en el otro equipo parece ser el descanso... Y todos a dormir que mañana nos vamos de evento.

Yo me declaro fan total del tipo del corral de la pacheca. Benjamín lo invita a comprobar si el catering para los artistas es el correcto y este “¿güisqui habrá?” y Benjamín en plan colega “hombreee, claro que sí” y el otro “lo digo para que me vayas poniendo uno” Crack! El de la magia pone algunas pegas. Teresa mucho trasnochar pero no se sabe ni los nombres de los que actúan.  Claro, que cuenta les traía a los de Stamina haberse acostado todavía antes, porque el tiempo que echaran haciendo el cántico se lo podían haber ahorrado... terrorífico... un poco en la línea de aquel que hicieron para el vino sin alcohol... da un poco de cosa ver a Juancho ahí arrancándose con palmeros como Benjamín, que para las operaciones internacionales será muy bueno, pero que va totalmente fuera de compás con las palmas.  Y se llenan los teatros y en diez segundos pasan las dos funciones... a mi me ha gustado más lo del flamenco, en la magia Teresa hacía cosas muy raras con las manos. Si yo hubiera sido Juancho habría dejado como maestro de ceremonias a Chiquetete, que estoy seguro de que lo habría bordado.  Todos están encantados de la vida de cómo ha resultado todo. A pesar de que Anahí tiene que salir a la calle a decirle a la gente que hay un after-party. ¿Otra vez haciéndote la calle? En el otro equipo son más precavidos y lo avisan antes desde el escenario antes de que acabe la función. Además dicen que van a invitar a copitas, y no a inflar globos como las Crash.es.  La fiesta de los globos es patética, en la otra hay ambientazo y además están los Gomaespuma. Tal y como ha resultado todo, todo lo que no sea que gane Juancho olerá a tongo a tope. Si Bassat estaba pensando en quedarse con la políglota debe tener el esfínter encogido.

Y van todos a la oficina, y todos están encantados de sus líderes, particularmente, como siempre, en lo que es el peloteo destaca Chiquetete, que a propósito de Juancho dice “es fabuloso, fantástico, perfecto, no tengo palabras...” Ellos veían todos a Teresa como una finalista, pero ellas no pensaban lo mismo de Juancho. Don Lluís, que por cierto, vuelve a estar inmenso, muy en su papel de ser superior, por encima del mal y del bien, discerniendo qué será lo más justo. Mucho me temo que no hay discusión. Mientras los dos no han tenido que destacar han estado correctos, pero cuando han tenido que ser ellos los que asumieran todo el protagonismo, la políglota no ha hecho nada y el Sr Mojón lo ha clavado todo. Veredicto. A zurrir mierdas la pija. Pero todavía le da vueltas al tema. Primero lo discute con sus consiglieres, Heinrich Topo Gigio y Regina Todavía Me Estoy Riendo Con Lo De Gomaespuma Que Ni Me Acuerdo El Tiempo Que No Me Reía Oye, que se han revelado como los grandes descubrimientos del programa. Los dos, pero especialmente el primero, brillante, divertido, carismático. Heinrich dus puants, Topo Gigio tuelf points. El hombre que le hizo sombra a Don Lluís. El hombre que pudo reinar. The Man Who Would Be King.

En la entrevista final, sin colegas, sin consejeros, sólo Bassat y los dos finalistas, Juancho responde a lo que le pregunta Don Lluís, y Teresa suelta su discurso de que puede hablar con tres cuartas partes del mundo y que si lo voy a resumir en tres puntos... bla bla... Qué rollo. Hasta Don Lluís la para para que se centre y le conteste y no le suelte lo que se ha estudiado. Es una pija empollona con un erasmus en China. Y ya está. Me he tenido que dar cuenta ahora. Y Don Lluís ya lo ha decidido y sólo resta que a imagen y semejanza de Dios a Adán en un gesto que inmortalizara Miguel Ángel en La Capilla Sixtina, alargue su dedo, y esta vez no para fulminar si no para insuflar vida, le suelte el sueldazo de las seis cifras a Mi Nombre Es Juancho Lanchares. Como diría GrandMa: “ha sido justo, como siempre”.

Y todos salen del despacho y saltan y bailan, incluso Chiquetete cierra el puño y hace un gesto como si hubiera ganado él. Todos menos la secretaria, que la pobre no sabe como seguir mirando al monitor de su computadora de cartón piedra con tanto jolgorio. Y con una lágrima de Juancho Lanchares, el hombre que mereció ganar y que no tenía la vida resuelta como la otra, termina esta primera edición de El Aprendiz español.

Gracias a todos otra vez. Fue lindo compartirlo.




en la imagen, Don Lluís Bassat le suelta cien mil lerus por año a Juancho Lanchares