viernes, octubre 22, 2010

Mujeres Ricas. Humor 2.0.

imposible no amarla
El mejor programa de humor de los últimos veinte años es sin duda Mujeres Ricas. Nunca he visto nada igual, un casting magnífico y un trabajo de edición portentoso. Ya el año pasado intuía yo que algo grande estaba pasando ahí, pero es que este año, se superan en cada episodio.
Ayer pusieron dos seguidos. Es todo tan excesivo. Tan superlativo.  Me encanta. Así a vuela pluma y rica a rica:

Verónica.
Esta es una de las nuevas. No acabo de verle la gracia a este putón colombiano recauchutado. Como Mar, se está haciendo mayor, y su viejísimo marido debe andar ya pensando en volver a cambiar de juguete. Cuando digo viejísimo quiero decir que andará por los ciento setenta años lo menos. Tiene una hija que es mucho mayor que Verónica, que como digo, tampoco tiene ni veinte ni treinta. La pobre debió nacer en una chabola y pasar sus años de infancia deambulando por las calles, esnifando pegamento hasta que algún alma caritativa se dio cuenta de que le habían crecido las tetas y se la llevó de viaje a algún club europeo. Desde allí debió comenzar su asalto al abuelo este que ahora le compra coches de veintitantos millones como quien no quiere la cosa. Dos cosas la hacen especial. La primera, que se sabe una fulana sin clase y no lo oculta, se deja llevar por todo lo que le aconsejan. Y la segunda, Víctor, uno de esos maravillosos secundarios de este programa, que es su mayordomo y hombre para todo. Un paisano de la muchacha que da unos primeros planos impagables cada vez que escucha a su señora darle órdenes. El día menos pensado se va a hartar de cambiar muebles de sitio porque sí, va a sacar la pistola y la va a liar pero bien. Arman una fiesta tontísima para celebrar el catorce aniversario a la que no viene el marido (¿dónde andará? hagan sus apuestas…). Víctor cumple su misión a la perfección y Verónica ya tiene el Porsche que quería desde que se lo vio a su amiga esa mañana. Lleva una vida muy triste esta mujer.

Nannis.
Es sin duda la estrella del programa. Todo en ella es genial. Es el mayor personaje de la historia reciente de la televisión desde Jorge-quién-me-pone-la-pierna-encima. No se corta un pelo y dice todo lo que le pasa por la cabeza. Incluido lo de despellejar a sus compañeras de programa.  Es imposible no amarla. A ella, a sus hijos, a sus perros, a su amigo gordo… Son todos espléndidos. La hija, Charlotte, es una diva. Una adolescente tarada que vive en su propio mundo de tetas operadas, revistas ridículas y mechas rubias. Es completamente adorable. Es seguro que va a triunfar en la vida. Es tan… auténtica. Tiene un peluquero majísimo, no habla inglés, en realidad casi tampoco español, está gordito y es muy mariquita y muy simpático. Un poco como Mauricio, el amigo obeso de la madre, de lengua tan afilada como la de su compañera de charlas descacharrantes en las que vale todo. Hay algo de tensión sexual ahí. Seguro. La quiere. Lo sé. Pero ¿quién no?

Nannis se va con sus dos hijos a París invitada por un compatriota diseñador. Charlotte quiere visitar el Mouline Rouge y Euro Disney. Y el hijo, en vez de a un dentista (qué desastre de boca tiene por Dios) quiere ver el campo del PSG y una tienda de deportes.  En el montaje no son muy buenos con él y lo hacen parecer un retrasado. Yo sin embargo, lo entiendo. Me pirran las tiendas de deportes, eso y las librerías (como Mar), son mi debilidad. No puedo ver una y no entrar. Charlotte tiene planes de ligoaspirarse (!?) pero acaba desfilando vestida de novia para el amigo de su madre. Y oye, las como son, no lo hace nada mal. Tampoco lo hace nada mal Nannis, que como no quiere ver la Torre Eiffel, que dice que es una mierda llena de chinos, le pega un repaso en toda regla a Mar… Dice que le tiene que tener rotas las pelotas de dar por saco a su criada (Pepita), “Mar es el ejemplo de una nueva rica total

Es muy tarde y mañana madrugo. Prometo sacar tiempo el fin de semana para hablar de Olivia, que es una señora, Natasha, que está tremenda y Mar, que hay que dejarla para el final, porque es lo mejor del programa. Un personaje de un absurdo tal que es imposible que sea impostado, cuando uno piensa que no puede ser más simple, te sorprende y va más allá en su espiral cateta. Muy grande Mujeres Ricas. De verdad.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Menos mal que vuelves con tus comentarios de los programas!

No digas que aqui no tienes madera para trabajar!

La panchita no me gusta nada ... muy bien descrita!

La rusa dijo una frase mítica: "existe superman, superwoman y Natasha Romanov!". Ahi la llevas!

Bravo!

Tiago Cotes dijo...

la verdad es que es una mina. pero es imposible acercarse ni de lejos con estos comentarios a la maravillosa experiencia que es verlo. no hay ni un segundo desperdiciado.

a mi me encanta la rusa cuando dice que ahora es amiga de la reina del tomate.

Luz dijo...

Estábamos mi futuro y yo viendo el programa éste el otro día, y nos acordamos de tu blog y comentamos que anda que no le sacarías tú punta a este programa ni nada... y mira por dónde no andábamos desacertados.
Por favor, saca tiempo de donde sea y sigue comentando este programa.
Sinceramente, yo al principio lo odiaba y más aún a sus protagonistas, pero no hay nada mejor que reírse de ellas (que no con ellas..).

Un saludo máquina.

Tiago Cotes dijo...

yo creo que ellas también se rien :-) si no es que ya no entiendo nada.
¡un saludo a usted y a su futuro!

Los gimnesios dijo...

¡Tiago que alegria leerte de nuevo! Hace poco comentábamos que bueno sería que escribieras sobre mujeres ricas..y mira!!! hacía meses que no entrábamos por aquí!
Aunque sin conocerte, a veces Jesús y yo hablamos de como nos hemos reído contigo (sobretodo en El Aprendiz).
Aún no hemos leído ni una frase; estamos ansiosos por empezar tus disecciones de las "pobres mujeres ricas".
Tus fans de Mallorca,

Jesús y Maria

Tiago Cotes dijo...

¡mallorquines! espero que lo hayáis pasado bien con las mujeres... que es una locura de programa...

Related Posts with Thumbnails