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"no estamos para desgastar neuronas" |
A ver, esto va ir rápido esta vez. Mi veredicto para el
capítulo de anoche es: mierda seca. Todo el ritmo, la alegría y el garbo del
programa de presentación se desvanecieron como las ilusiones de las granjeras
de tener una hermosa casa de campo. Los cuchitriles en que las han ido alojando
distan mucho seguro del palacete campestre que anhelaban
cuando se decidieron a escribirles a los membrillos estos. Como se suele decir,
la primera en la frente.
Melendi. El de las orejas grandes y la dentadura dispar. Resulta
que vive en medio del bosque, dentro de un remolque que ha instalado debajo de
un corral de gallinas. Eso sí, con macetas en la puerta. A él se le ilumina la
cara cuando las ve asomar por el camino de piedras que lleva hasta sus
dominios. Es un poco como la charca de Shrek, pero sin personajes de cuento
danzando por allí. Las caras de ellas, sin embargo, son poco menos que de
espanto. Chasco mayúsculo al avistar la choza. Seguro tuvieron que pasar como
mínimo un par de días para que asumieran que aquello no era una broma pesada de
producción. Melendi se ha revelado como un ermitaño en toda regla. A ellas las
instala en el minúsculo dormitorio de la caravana, donde si apenas tienen espacio
para recostarse no te digo ya para abrir los maletones que se han traído
imaginándose que iban a Downtown Abbey. Él dormirá en el sofá cama del
salón/cocina/baño. Hubiera pagado por
ver los sueños de las muchachas esa noche. Seguro se veían a ellas mismas
huyendo de allí con la camisa ensangrentada y el Melendi persiguiéndolas motosierra
en mano. El muchacho es tela de soso, se
ve que está acostumbrado a que se le pasen los días sin abrir el pico, y de un
día para otro no se va a poner a charrar ahí como una cotorra. “Estamos todo el rato preguntándole cosas,
pero nada, el tío no tiene conversación”. Eso sí, les prepara un sándwich para
cenar que tiene muy buena pinta. Ellas ya cuentan los minutos para pirarse de
allí, así que mientras, al menos, se hacen amigas. Que pasa siempre con las aspirantas a las que no interesa el granjero. Al
muchacho solo se le ve cómodo cuando las acuesta y se queda viendo la tele.
Román. El que rumia, el tontico, el gordito. Este tiene el
pueblo revolucionado, un poco como todos los pueblos con un acontecimiento así,
claro. Incluso se lleva a las muchachas a la plaza, para presentarlas, “vamos a saludar a la gente a la plaza”.
También les tiene preparados unos catres deprimentes. La esquizoide dice que le
encanta. NO ES POSIBLE. Ellas ven
que allí quien corta el bacalao es la madre de Román, Luci, que promete dar
mucho juego, y le hacen la pelota todo lo que pueden. Hasta Román se cosca “digo yo que algo tendré yo que decir”.
Se las lleva a cenar a lo de la madre, que les prepara una ensaladilla rusa que
tiene una pinta espectacular. Teresa, que es así como se llama la que mira
fijamente a las ovejas, entiende de todo, de espejos, de conejos, de degollar
pollos. La otra está que trina. “Anda que
no te lo tenías calladito”. Es
canaria y se trae un aire a la princesa Fiona cuando se deshace el hechizo. Lo
que me gustó a mi Shrek, oye. Engullen
las dos como si no hubiera mañana. La canaria marca distancias con la suegra, ahí
podrían saltar chispas. La suegra mientras no se decide y dice de Teresa, “se la ve buena chica, un poco hermosita pero
bien”. Vaya, que está gorda hasta para el repollo que tiene por hijo.
4 comentarios:
Ohhh... pues a mí me encantó el programa. Melendi palo seco hasta físicamente, y ellas, muy parecidas a las de Priscilio del año pasado: dos chavalas simpáticas y con ganas de pasarlo bien, pero entre ellas, ya que el zagal no se arranca. Y Román, pues lo que prometía, vamos poca cosa. Sin embargo impagable el comentario de la pretendienta: "Yo que entiendo de espejos, te digo que ése es muy bueno" Respuesta de la Luci: "Lo hice yo en manualidades" Qué momento. Ahí es donde nos dimos cuenta que no había degollado un pollo en la vida y pese a que, a priori, parecía la más normal, nos va a dar grandes momentos.
Muchas gracias por volver a comentar. Se te lee aunque no siempre se abra la boca.
Espero con ansia la crónica de la granja de César, menuda tarada la Elo. Su rival lo tendrá fácil, debería limitarse a no decir nada y dejar que Elo se elimine ella solita. ¡Que cansina!
gran momento el de los espejos sí. pero vaya, que esta pareciera normal... estoy deseando verla estrangulando un pollo...
y entiendo que el comentario este haya quedado un poco sosillo. la verdad es que no pensaba ni hacerlo... me aburrí viendo el programa, pero como intuyo que va a haber grandes momentos y esto me lo podía liquidar rápido no quise dejar de comentar.
y efectivamente, la contricante de elo a poco que sea medianamente lista va a ganar a lo rajoy.
y nada, gracias por comentar, esto tiene mucha más gracia así. ahora, ponerse nombres, que no cuesta nada y así puedo dirigirme de alguna manera a vosotros.
salud!
Esta claro que esto se rodó a principios de verano, sino Elo hubiera pillao una neumonía. Esta mujer tiene el grado de paranoica acorde con sus escotes!!
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